LA POESIA DE RICARDO

RECUERDOS DE ANTAÑO DEL PUEBLO DE OLVÉS

La “Comarca” es un medio
Que fomenta la cultura
De los pueblos que la integran
Que describen con mesura
Unas vivencias de antaño
Que deseo comentar
En nuestra vida de entonces
Eran lo más habitual
Mi pueblo querido es OLVÉS
El lugar donde naci
Conmigo va su recuerdo
Porque está dentro de mí
El hombre es como una planta
Con sus raíces profundas
Si no pretende regarlas
El alma se queda muda
Antes de extenderme más
Quiero siempre recordar
Lo grandiosa que antes era
Nuestra Iglesia Parroquial
Bajo el signo de su nombre
De Santa María la Mayor
Resuena entre sus columnas
Memorias de protección
Que como Madre amorosa
Sus gracias nos dispensó
En actos muy primordiales
Postrados con devoción
Allí mantuvo el origen
Nuestro Bautismo al nacer
Que siempre conservamos
En lo más hondo del ser
Donde se inicia la vida
Nunca se olvidan rincones
Hechos y circunstancias
Que hacen vibrar corazones
Recordaremos la Escuela
Donde está el Centro Social
Situada allí en la Plaza
Hoy convertida en el bar
Antes se decía Escuela
Ahora su nombre es “Cole”
Acudíamos treinta chicos
Con respeto y con valores
Las chicas iban aparte
No nos podíamos juntar
Entonces no era extraño
Era lo más habitual
Todas las materias claves
Las teníamos en un libro
Elemental Grado Medio
Cultural pero sencillo
Recordaremos la plaza
En señalados festivos
Con el juego de pelota
Que se hacia los domingos
El bandeo de Pendones
En la Virgen de Semón
En la gran Fiesta del Corpus
Y en el día de la Asunción
En el llano de la calle
Siempre llamado “El Portal”
Al tango con las tironas
Nos poníamos a jugar
Pasamos a hacer memoria
Del trabajo y de la vida
Que describíamos entonces
Con altivez muy sentida
Hace algún tiempo
El pueblo era diferente
Todo estaba cultivado
Cubierto en un manto verde
En el monte los trigales
Ondeaban con el viento
Y la besana surcaba
Sin desviarse un momento
La tierra con sus labores
Removiendo y cultivando
Con el par de mulas y albarcas
Y el día completo arando
Era todo muy somero
La técnica no daba más
Con vertedera y arado
Era muy superficial
El fondo era pequeño
Al hacerse manual
Y la dureza infinita
El esfuerzo mucho más
Pero el tesón y la grandeza
Y el empeño era tal
Que todo lo compensaba
La ilusión y el buen yantar
En un barreño en la silla
Nos lavábamos la cara
Las madres la sucia muda
Con frecuencia nos cambiaba
Si comparamos la vida
Aquella con la actual
Entonces sin ningún contagio
Comíamos al natural
Es que alimento más sano
No hay punto que comparar
Los conejos las gallinas
Y los pollos al corral
A la venida del campo
Recogíamos la arpillera
De cerrajas y ababoles
“pa” comer la conejera
Entonces OLVÉS si gozaba
De su ambiente familiar
Con seiscientos habitantes
Te cruzabas al andar
Por las plazas y las calles
Caminando sin cesar
De todos los convecinos
Que sentíamos ya no estar
La mayoría se encuentran
Gozando del Amor Supremo
Todos unidos Felices
En ese Descanso Eterno
Vibraciones del Espíritu
De nuestros seres queridos
Desde la Casa del Padre
Bendicen nuestros caminos
Otros nos hemos marchado
Para buscar posición
Pero siempre a nuestro pueblo
Cargado en el corazón
Los de Olvés siempre han gozado
De economía y hacienda
Buenas cosechas y precios
Que metían en la “celda”
Entonces daba sus frutos
Holgados en convivencia
Teniendo buenos recursos
Y casas en residencia
Que yo me alegro infinito
De la buena posición
Que disfrutan los de Olvés
Con su trabajo y tesón
Infinidad de recuerdos
Anclados en la memoria
En el paisaje del alma
Almacenamos la historia
Pero hay que vivir el presente
Y hacer lo mejor cada día
Y pensar en el futuro
De nuestra propia familia
Entonces se carecía
De calefacción central
Vivíamos sin conocer
Nuestro calor ideal
No había ninguna ducha
Para limpiarnos el polvo
Que cogíamos en el campo
En la era y el rastrojo
Teníamos alguna balsa
“pa” ponernos a remojo
Como la de “Valdepizco”
Entre las cañas de Adolfo
Aquel entonces los árboles
Eran cultivos escasos
Sólo se plantaba viña
Cereales y sembrados
Se recogían las garbas
En brazaus “pa” hacer el fajo
Con un cencejo de paja
Con el garrotillo atado
Los haces se amontonaban
En el rastrojo en fascales
Para después acarrearlos
A las eras con los viajes
Cuando la parva en la era
Amenazaba tormenta
Todos deprisa barriendo
Y con la barrastra alerta
Después aventar con horca
Siendo el viento favorable
También con aventadora
Brazos fuerzas manuales
Y las mujeres cubiertas
Con la toca y el sombrero
Se evitan calor y polvo
Y la criba en movimiento
Separando trigo y paja
Para hacer la “molinada”
Reservando pan “pa tol” año
Y así pasar la jornada
Los trigos cuanto más calor
Era más fácil segar
El hombre estaba curtido
En su tarea aguantar
Muy hábiles con la hoz
Y la “zoqueta” en la mano
Abarcando más espigas
Con la “mangueta” en el brazo
Los subían a siega
También los quiero mentar
Se ganaban el sudor
Y el merecido jornal
Sumisos con la HOZ al hombro
A la siega por Castilla
Superando el gran esfuerzo
Por el bien de la familia
No eran fáciles los tiempos
Que se vivían entonces
Teníamos pocos haberes
Resignados y pacientes
Eran faenas de antaño
Duras para trabajar
Seguro mejor que no vuelvan
Sólo es bueno recordar
Y en la memoria tener
Nuestros recuerdos humildes
Para no ser arrogantes
Y sentirnos más felices
Estábamos habituados
Teníamos la dignidad
De esa que ahora nos falta
Para gozar de la Paz
Las mañanas invernales
Con escarcha blanqueada
Que arroja la fría noche
Sobre la hierba quebrada
Contra la nieve y el frío
Salíamos a podar al campo
Con la fiambrera llena
La bota y el tocino magro
Después replegar sarmientos
Y recoger las gavillas
Que las traíamos a carga
En tinadas muy sencillas
Cruzando unas cuantas vigas
Que servían de tejado
Para después poco a poco
Gastarlas durante el año
Los abuelos se ponían
Recia chaqueta de pana
Enrollado el tapabocas
La boina bien encestada
Haciendo hoyos a pico
Venga y dale con la azada
Con ilusión plantar viña
Y con la legona alzada
Mientras nuestras abuelas
Con sus tomillas muy gruesas
Y sus catorce refajos
Y medias de punto negras
Bien encendido el brasero
Por si acaso el frío aprieta
Que el relente es muy traidor
Previsoras y en alerta
Después se hacía el almuerzo
Y las magras con tomate
Las judías con oreja
Y el buen vino “pa” remate
Las formas de calentarnos
Eran muchas y variadas
Rudas pero servían
Para calmar las heladas
Calentador de orificios
Con brasas en su interior
Moviendo dentro la cama
Para extender el calor
Cuando no con un ladrillo
Previamente calentado
Envuelto en toalla vieja
Pa no sentirte quemado
También con las bolsas de agua
Y recipientes de barro
Ingeniosos artilugios
Que ahora nos son extraños
Los días de nieve y frío
Se enciende el hogar temprano
Con sarmientos paja y leña
Y los pucheros al canto
Preparando la comida
Lentamente cocinando
Sabían mejor que ahora
Los alimentos sanando
Contemplación desde lejos
Chimeneas humeantes
Eso demuestra que había
Los máximos habitantes
Así vivíamos felices
En nuestra humilde morada
Nada echábamos de menos
Porque no conocíamos nada
El recuerdo de la infancia
Del pueblo que te vio nacer
Eso no se olvida nunca
Aunque este lejos de él
Lo que nos mueve la vida
Cambia el paisaje del alma
Añoranza tiempos felices
Con valores serenos y en calma
El hombre que no cultiva
Sus raíces fruto y calor
Nunca más puede crecer
Ni elevar su corazón
Las umbrías y solanas
Nos daban pan pa tol año
Segando a hoz los trigales
Acarreando y trillando
Siempre con el par de mulas
El día encima el arado
Con el sudor en la frente
Y fiambrera en el tajo
Comiendo migas con “guevo”
Y morcillica de hígado
Con las güeñas y fardeles
Y la papada en asado
Cada familia en Olvés
Mataba sus dos tocinos
Con ello había sustento
Para todos OLVESINOS
Los tocinos se criaban
Con el pienso y el salvado
Elaborado en la tierra
Y criados todo el año
A los cochinos también
Les hacíamos molinada
Molturando cereales
De centeno y de cebada
Por eso el gordo tenía
Más alimento y sabor
Que todo el magro de ahora
Sin propiedades ni olor
Cada vecino de Olvés
Cuidaba también una cabra
Que el cabrero recogía
A pastar por las mañanas
Así todos días había
Leche pa desayunar
Con un espesor de nata
Fresca y al natural
Cuando el animal paría
Placentero era tomar
La blancura de “calostros”
Y la fuerza recobrar
En poco tiempo se hacían
Unos buenos cabriticos
Era delicia comerlos
Con muchos años friticos
El que esto escribe de niño
Infante se alimentaba
De otras madres parturientas
Y las ubres de una cabra
Pues mi madre no tenía
Leche materna en su pecho
Y otras madres ofrecían
Los “tragos” de mi sustento
Cuatro madres he tenido
Soy un hombre afortunado
Hay otros que desconocen
La suya y no son amados
Junto con la del Cielo
Y aquella que me dio el ser
Tenía dos madres de leche
Que apaciguaban mi sed
Ahora solo me queda
La Madre del Redentor
Ella siempre nos Bendice
Aunque soy un pecador
Antes se demostraba
La solidez de familia
Eso ahora es impensable
Porque ha cambiado la vida
La leche materna es
El alimento ideal
Al Bebé siempre protege
De toda la enfermedad
Siempre es beneficiosa
Su coste resulta cero
Y en cualquier hora y lugar
El bebé toma alimento
La Mamás con buena leche
Ya no emplean el “pezón”
Porque así no se deslustran
A cambio está el “biberón”
Perdonad si me he explayado
En la lactancia materna
Es porque yo lo he sentido
En mi infancia ese tema
Por eso yo me criaba
Muy raquítico y pequeño
Aunque tenía tres madres
Y la cabra de sustento
Recuerdo cuando el mostillo
Lo hacíamos en la caldera
Con “arrope” mosto cocido
En la despensa y tartera
Orejones por la mañana
Sopas de leche en la cena
Y una buena rebanada
De mostillo en la merienda
Cuando el calor apretaba
Solíamos echar la siesta
En el catre de mi abuela
Allí en la casa vieja
Cuando no en la “marcega”
Rellena de paja larga
O encima de los serones
Y también sobre la “jalma”
Los jóvenes desconocen
Toda la humilde lección
Que padres y abuelos pasaron
Para ellos vivir mejor
Muchas veces la arrogancia
Y orgullo que jalonamos
Por las sendas de la vida
No lo tendríamos tanto
Si en el sentir humilde
Mantuviéramos presente
Nuestras raíces modestas
Sin parecer prepotente
Pues la vida es un camino
Que se nada con Esperanza
Con Amor Alegría y Fe
Y la Grandeza en el Alma
Por la mañana temprano
Le doy Gracias al Señor
Por regalarme la vida
En abundancia de Amor
Pero sigamos el tema
De la razón y el pensar
De nuestros antepasados
Que luchaban con valor tenaz
Todo sabía muy rico
Sin tener colesterol
Pues la vida se curtía
Con la energía del sol
Los pulmones se ensanchaban
Aire limpio respirando
Se dormía como un ángel
Por la noche descansando
Recuperando energías
Que se agotaban labrando
Recolectando cosechas
Y los viñedos picando
En el sitio las piscinas
Allí estaba la fragua
Para ir a aguzar temprano
A las cinco de la mañana
Qué bonito es recordar
Cuando en el pueblo teníamos
El Médico y Practicante
El Cura y el Secretario
Junto con los dos Maestros
Tiendas y carnicerías
Servicio Veterinario
Para las caballerías
Las calles eran de tierra
Ahora están cimentadas
Y siempre que nos llovía
Se ponían embarradas
Todos recordamos como
Se hacía nuestra vendimia
En cuévanos con las mulas
Cargando viajes tol día
Cuando llegaban las mulas
Todo estaba calculado
Las capitas preparadas
El viaje estaba colmado
Cuando terminaba el día
Se llenaban los cuévanos
Para cargar al siguiente
Por la mañana temprano
Y a la vuelta se llevaba
Un buen y sabroso almuerzo
De unas patatas con congrio
Que daba gloria comerlo
Al final de la jornada
Correspondía pisar
Con los pies todas las uvas
Vertidas en el lagar
Así de duro era entonces
El trabajo que se hacía
La técnica que hay ahora
Toda se desconocía
No digamos cuando el VINO
Al sacarlo del lagar
Se preparaban las cubas
Para limpiar y enzufrar
Con la cerilla y el candil
A la bodega bajabas
Apagada o encendida
El oxigeno marcabas
Cuando el aire estaba limpio
Y podías respirar
Nos metíamos a “romperlo”
Desnudos en el “lagar”
Al mejor punto de apoyo
La soga bien sujetabas
Que arrollada sobre el cuerpo
La inmersión asegurabas
Deshaciendo la gruesa capa
De orujo en la superficie
La introducías a fondo
Metido hasta la calvicie
El aire de la bodega
Se convertía en esencia
En Fortaleza y Color
Que desprendía su fuerza
Era un solemne ritual
El que se hacía en familia
Cuando abríamos el tapón
Del lagar con alegría
Se preparaban las cubas
El decalitro el envás
La escalerica en la pila
Para mejor trabajar
Cuando se vendía el vino
Directamente se hacía
Por sabor y bouquet
Y el olor que desprendía
El clásico comprador
Para probar el buen vino
Se dirigía a la cuba
Observándola con tino
Y se le echaba un “ranzuelo”
Perforando la madera
Del redondel de la cuba
Con una fina barrena
La palabra de “ranzuelo”
No la nombra el diccionario
Es lenguaje aragonés
Ahora no es necesario
Parecía un surtidor
Que brotaba sangre pura
Que salpicaba brillando
Como color de púrpura
Enseguida con un taco
De madera preparado
En ajuste al orificio
Que se había perforado
Y todo se convertía
En acto ceremonial
Que te hacía ser más grande
Dándote seguridad
Había un grupo de amigos
De probada salud y fuerza
Les decíamos “medidores”
Por su tesón y firmeza
Que tomaban el arriendo
Del “cántaro” pa tol año
Sacando el preciado vino
De las bodegas de antaño
Cuantos votos en la espalda
Transportaban en OLVÉS
Por eso quiero evocarlos
De la “Comarca” a través
De vez en cuando tomaban
Un merecido descanso
Y con la hortera en la mano
A morro echaban un trago
Así lapidar en el tiempo
El valor tenaz de estos hombres
Y en el futuro confirmen
Las nuevas generaciones
Viendo a sus progenitores
Con que dignidad asumían
El sostén de la Familia
Que entrañaban y querían
Todas las tareas eran
Un esfuerzo infrahumano
Pero el fruto te RENDIA
Presto cobro y en la mano
Ahora tenemos mucho
Trabajo tecnificado
Pero salimos sin blanca
Y el corazón muy sangrado
Qué triste realidad
La impotencia que sufrimos
Los nobles agricultores
Sumidos en el abismo
Del trabajo manual
Hemos pasado al tractor
A la técnica moderna
Con equipos de motor
Así hemos conseguido
Un trabajo suavizado
Se rinde más y mejor
Y el cuerpo vitalizado
En el ángulo sombrío
Producido por la albarda
Que procurabas cubrir
Con el ancho de la manta
También en las cepas grandes
Poníamos el vino y el agua
“pa” beberla lo más fresca
Cuando la sed apuraba
O en algún de los penachos
Qué rayos de sol no entraba
Colocabas el botijo
Para conservar el agua
Y beberla fresca y suave
Siempre que se podía
Porque el calor penetraba
Hasta terminar el día
Pero antes era el sudor
Que transpiraba la piel
Te daba el sol en la cara
Que promovía la sed
Ahora el dolor es más grave
Porque daña tu interior
Se te comen la cosecha
Tu labor y el resudor
El labrador se da cuenta
Que no se ve compensado
Al no pagarle lo justo
Se encuentra desanimado
Que nota el agricultor
Perspectiva catastrófica
Se arrancan todas las viñas
En consecuencia dramática
Otra cuestión la sequía
Que agrava más el problema
De nuestro buen campesino
En marginación extrema
El medio campo rural
Son los hermanos pobres
Crónica la situación
Que pagan agricultores
Ellos son los olvidados
De servicios culturales
De los medios financieros
Y de fuerzas sindicales
Aquellos pueblos pequeños
Casi todos son mayores
Porque los jóvenes marchan
Buscando vidas mejores
Una grave decepción
Recelosos de gobiernos
Partidos y sindicatos
Y política de precios
Muy reacios para unirse
Resignados deficientes
Creando asociaciones
Que funcionan malamente
A juicio en este momento
Nos parece necesario
Colaboración conjunta
Y defender el salario
Nuestras voces de creyentes
He querido levantar
“porque Dios hizo el Campo
Y el Hombre la Ciudad”
Antes el almuerzo era
Consumición natural
Ahora son las personas
Las que te hacen naufragar
El trabajo físico no es tanto
Como la extorsión moral
Que tenemos que sufrir
Aguantar y soportar
Eso nos quiere decir
Que antes la vida era sana
La convivencia y la estima
No eran manipuladas
Se respiraba nobleza
Todos nos queríamos más
Porque el tesón y el esfuerzo
Daban lazos de amistad
En los tiempos actuales
Tenemos más abundancia
Pero mermado el “valor”
De notas en resonancia
Tales como la familia
La honradez y la palabra
Antes era un testamento
Ahora es moneda falsa
Siendo la vida tan corta
Porque no somos mejores
Convivimos en Amor
Con bondad y sin rencores
Por eso todos debemos
Querernos hasta el final
Pues seremos más dichosos
Disfrutando de gran Paz
Pero volvamos al pueblo
Querido y hospitalario
Todo el que va es recibido
Con un generoso abrazo
Es bonito ser querido
Pero más bonito es querer
A veces se hace difícil
En este mundo cruel
En la época actual
Cuesta mucho ser honrado
“Lo que cuesta es lo que vale”
Hay que estar enamorado
No hay que dejar el intento
Por la fe que profesamos
Así daremos ejemplo
Al mundo que respiramos
Dejándolo con valores
Más verdadero y humano
Al mirarnos con limpieza
Y respetando al Hermano
Aquí expongo en precario
En somero entendimiento
Aún se pueden transcribir
Muchísimos pensamientos
Vivencias de nuestra época
¡Tanto hay que recordar!
En el curso de la vida
¡Hay mucho que interpretar!
Se constata que a menudo
Pese a tantos incentivos
La gente no es más feliz
Que en los tiempos primitivos
Porque el rico que ambiciona
Tesoros con avaricia
Es un hombre en la miseria
Con una pobre sonrisa
Sin embargo aquel otro
Conformado en su humildad
Extrae de su interior
Lazos de Felicidad
Por eso siempre hay que estar
Acordes con nuestra vida
Y acatar la voluntad
Que el destino nos convida
Hay que amarnos cada día
Con el fuego y resplandor
Tanto en los días de lluvia
Como en los días de sol
Por encima he repasado
Las costumbres del vivir
Lo normal de la familia
Entre el amor y el sentir
Quiero hacer solo un inciso
Como aprendimos la Fe
Todos sumisos al Cura
Como Cristianos de Bien
Una fe imperativa
Sin experiencia de Dios
Con tal que fueras a Misa
Cumplías con el Señor
Antes según la Iglesia
La primera Comunión
Con tres horas en ayunas
Para tomar al Señor
Nuestras madres previsoras
Después de haber comulgado
En la misma iglesia nos daban
Un chocolate apurado
Cuando me hice adolescente
Al cura le parecía
Que era yo más fervoroso
Y por eso me cogía
Para anotar feligreses
Que se habían confesado
Así el cura sabia
Quien era el bueno y el malo
Cada año en Pascua Florida
Cumplíamos el Sacramento
Como buenos penitentes
Con todo requerimiento
Mi madre todos los años
Siempre se confesaba
Porque su hijo sigiloso
En el papel la apuntaba
Muchos que no acudían
No eran malos ni mejores
Pero el cura los echaba
Con dureza en los sermones
Esa ilustración de fe
Raquítica educativa
Llena de gestos endebles
Que el interior no cultiva
En reflexión que diría
El Dios Compasivo y Bueno
De aquellos actos sin vida
Que se imponían al pueblo
Para todos estamentos
Se requería licencia
De una buena “conducta”
Y acreditada obediencia
Igual para trabajar
Se prohibía en Festivo
Y prestos a la Parroquia
Extraer nuestro recibo
Ni el poder Civil y Eclesial
No sabían comprender
Que “el trabajo es oración”
Con “prole” que mantener
Curtidos por el trabajo
Con el sudor en la frente
Dios miraba con ternura
A nuestros padres sufrientes
Cuando venía el Obispo
De Visita Pastoral
Todos atentos a Misa
Era Fiesta General
Le hacíamos Arcos de Triunfo
En la entrada principal
Todos con Palmas y Ramos
Con gesto reverencial
El Obispo con su grey
El cura expresa contento
Por haber demostrado todos
Sumisión y acatamiento
El cura ojo avizor
Escudriñaba el instante
Por si alguna no rendía
Pleitesía al visitante
Tanto se ha desfigurado
El Evangelio de Amor
Que no se parece en nada
Al que Jesús proclamo
Cuando asistíamos a misa
En la Fiesta Nacional
Íbamos todos en fila
Con el Maestro a cantar
Cantábamos el “cara al sol”
“Prieta las filas·”
Y también teníamos
Un bollo pa alimentar
Hemos pasado un “ratico”
Como Amigos platicando
Esto queda en la Memoria
Ya no vuelve lo de antaño
Es bueno que no retorne
La vida sigue cambiando
Los adelantos de ahora
Ya se quedan anticuados
Lo mismo que nuestra vida
Aumentará con los años
Llegaremos a los cien
Estando buenos y sanos
Hay sueños que el hombre tiene
Que hacerlos realidad
En su interior pa que viva
El gozo de la Verdad
No hay que perder la Esperanza
De ver a los nietos viejos
Contemplaremos sus vidas
Desde la faz de los Cielos
Hay versos que restan vida
Pero estos me la sostienen
El  Gozo y esta Alegría
Ya nadie me la retiene
La tengo que abrir al mundo
Ondear a los cuatro vientos
Para sentirme Feliz
Y lapidarla en el tiempo
De los recuerdos de antaño
Me voy a la actualidad
Y el pensamiento sublime
Llaga hasta la Eternidad
Pero a todos enriquece
Es muy bueno interpretar
El contenido que plasmas
Para darlo a los demás
A veces no encontrarás
Estos versos muy perfectos
En muchos puntos podrás
Discrepar de sus defectos
Sencilla es mi poesía
Bastante superficial
Quiero simular a Pilatos
“lo escrito, escrito está”
Que estos módicos versos
Produzcan y hagan pensar
Aquellas consideraciones
Que tú puedas alcanzar
Solo quiero que veáis
El buen sentir de lo escrito
De estos suplicantes versos
Pasando un feliz ratico
Con gran afecto y cariño
Me despido de vosotros
Salud os deseo a todos
Para vivir jubilosos